El primer híbrido comercializado en la Argentina ahora fue llamado a revisión por un defecto en el sistema de frenado. Antes había sido convocado por su tapete pistero.
El Prius fue el lanzamiento más importante de Toyota Argentina en el 2009. El vehículo que combina una motorización naftera con otra eléctrica fue presentado como la cara visible del compromiso ecológico de la marca japonesa. Sin embargo, su llegada coincidió con dos llamados a revisión por problemas técnicos que comprometieron su seguridad.
A fines de septiembre pasado, Toyota llamó a revisión al Prius –y a varios otros modelos, como el Camry- para corregir un defecto de diseño de las alfombras de goma ubicadas del lado del conductor: su diseño podía trabar al acelerador en su máxima apertura y fue responsabilizado por cuatro muertes.
Más tarde se detectó que el inconveniente iba más allá de las alfombras y que había una falla en el diseño del mecanismo del acelerador. Esto ocasionó el mayor recall de Toyota en Estados Unidos, pero no afectó a ningún modelo a la venta en la Argentina.
Esta mañana, Toyota anunció un recall mundial del Prius 2009-2010 por un defecto un su sistema de frenos: “El vehículo puede experimentar una frenada inconsistente durante la aplicación de los frenos sobre superficies desperejas o resbalosas”.
Este recall abarca una vez más a los Prius comercializados en todo el mundo, incluyendo a la Argentina. De todos modos, la presencia de este híbrido todavía es simbólica en nuestro país.
De la media docena de unidades patentadas en estos meses, casi todas pertenecen a Toyota Argentina para pruebas de demostración. Las pocas ventas no se deben a un problema de frenos o de acelerador: la razón está en su precio.
Salió a la venta en nuestro país con un valor de 49.700 dólares, pero Toyota Argentina anunció que este monto bajará una vez que el Gobierno Nacional le otorgue beneficios impositivos a los vehículos ecológicos. De este modo, la demanda del Prius en la Argentina avanza tan lento como las intenciones del Gobierno de desgravar a los híbridos.