Como regular los faros del coche:1) Situar el vehículo con los faros muy próximos a la pared y marcar en esta sendas cruces que correspondan a la altura y distancia de los centros de ambos faros uniéndolas posteriormente por medio de una linea horizontal. Los neumáticos deben estar inflados a la presión correcta y el vehículo descargado. Hacer esta operación en un lugar nivelado (en mi caso en el garage).
2) Retirar el vehículo de la pared hasta una distancia de 5 metros asegurándose al hacerlo de que la orientación de las ruedas sea la correspondiente a marcha en linea recta.
3) Si el vehículo tiene regulador de altura de luces en el interior, ponerlo en la posición correspondiente a vacio o posición 0.
4) Encender la luz baja y actuar sobre los tornillos de reglaje hasta que cada uno de los faros quede 5 cm por debajo de la linea horizontal trazada anteriormente y bien centrado sobre la cruz. Esta operación se realiza con mayor facilidad tapando uno de los faros mientras que se regula el otro. Durante la operación se observara si el ángulo formado en el haz asimétrico en el centro del a cruz es el adecuado (15º).
Los tornillos de reglaje de los vehículos están generalmente ubicados en la parte posterior del faro y en los extremos de una de las diagonales del mismo. Con el tornillo situado en el mando del corrector de altura de faros, al apretar se baja la altura del haz de luz, al mismo tiempo que se desplaza lateralmente, mientras que al aflojar se obtiene el efecto contrario. Hay un tornillo situado en la parte de abajo y colocado diagonalmente con respecto al anterior, que actúa a la inversa, y, mediante los 2 puede conseguirse el perfecto centrado del haz de luz.
En algunos vehículos, el emplazamiento de los tornillos de reglaje se encuentra en el frontal del faro, en una de sus diagonales. El método de reglaje es similar al descrito y cuando se ejecuta debe tomarse la precaución de posicionar el corrector de altura en situación de vehículo sin carga.
La regulación de los faros puede lograrse también con la ayuda de un regloscopio, cuya óptica se sitúa frente al faro que se va a reglar, a una distancia aproximada de 30 cm. El haz de luz incide en una pantalla situada en el fondo del regloscopio sobre las que estan marcadas las lineas convenientes para determinar si el reglaje es correcto. En estos regloscopios se dispone además de un fotometro, en cuya escala puede determinarse si la intensidad luminosa del faro que se esta comprobando es correcta, o por el contrario, si el reflector ha perdido brillo y no refleja suficientemente la luz.
Fuente: Internet+Cerebro